miércoles, 22 de octubre de 2008

Ultimas noticias de la radio: Paro a Hebe en la 530, Rivadavia Bizarra, El Mundo para atrás y radios del CIE en la cuenta regresiva




*Ya el 17 pasado se supo que los operadores técnicos de la AM 530 (La voz de las Madres), que regentea Hebe de Bonafini, iban a ir a un paro el día 20 y en su defecto el 21. Hace minutos nos enteramos que la radio estuvo sin salir al aire durante varias horas ayer y antes de ayer. Parece que la cosa viene por problemas salariales ¿Qué pasa? ¿se trata de otra jugarreta de Sergio Shocklender?

*Después de todas las desgracias que les tocó y toca vivir a los trabajadores de Radio Rivadavia con el corleónico Luis Cetrá, parece que algo maldito se ha ensañado con ellos y ahora tienen como gerente de noticias al mamarracho de Jorge Bizarro, he perdón! Pizarro. El delirante acelerado que supo cagar a varios compañeros en su paso por América TV en épocas de Eurnekián ya anda por los pasillos de la emisora pegando gritos como una loca y exigiendo a los cronistas que se movilicen en subte. Encima que cobran el sueldo en cómodas cuotas este tipo pretende que los periodistas pongan plata de su bolsillo, ¿está más loco que nunca!...

*Sigue la crisis de años en Radio El Mundo, donde ya se plantea la posibilidad de tomar la emisora. Parece que el embrollo entre la empresa Infofax, que perteneciera a un asesor de imagen (César Mansilla) y el supuesto traspaso de la radio a Devicom- Device, desemboca ahora en que ante la crisis, el Estado propuso poner 150 pesos por trabajador para calmar la cosa y que no haya despidos. Los dueños no quieren aceptar la propuesta, eso los comprometería a no despedir y eso es precisamente lo que quieren hacer.

*En días culmina la conciliación acordada por los trabajadores del Grupo CIE y los mexicanos que quieren deshacerse de empleados a toda costa. De los últimos 15 despidos, no se tomó a tres, y la empresa se salió en parte con la suya. Después de los retiros voluntarios y los rajes no se contrató a nadie más y los que quedan tratan de hacer buena letra porque saben que vienen tiempos difíciles en las calles Freire y Conde.

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