lunes, 8 de agosto de 2011

Los spots berretas y reccionarios de la oposición son cuestionados hasta por el gorilaje del diario La Nación

Basta ver cinco segundos de archivo del verdadero Alfonsín (Raúl), por ejemplo en este caso cacheteando a Hadad, para entender que el insustancial y volátil Ricardito es una mueca absurda de su padre, quien se debe retorcer en la tumba cada vez que el primogénito pide estupideces tales como la renuncia del enemigo público número uno del reaccionarismo naZional en la Argentina, el Doctor Eugenio Zaffaroni. Que te operen Feinmann, Hadad y Fontevecchia debe ser un privilegio para el Ministro de la Corte Suprema, que lo ataquen fachos de esta calaña debe haber levantado su moral, sin dudas ¿o no?. En medio de ese núcleo de energúmenos prefirió ponerse la semana pasada el candidato de UDESO, de quien por otro lado no sorprende nada. El hecho de haber abandonado a Binner para pasarse a las filas del amigo del senador Gerardo Morales, Francisco De Narváez es algo que no tiene retorno, que puede sorprender que le tire besos a Macri o haga un spot de campaña reaccionario como este. Después de la repugnante escena del ciudadano robado que festeja que no le hayan quitado el auto, pareciera que fuera a aparecer el comisario Villar seguido por un escuadrón de la "mejor policía del mundo". Esta línea propagandistico-editorial, como aquella de la "Invasión silenciosa" pueden dar miedo, pero claro, también puede dar risa, así lo prefirió el secretario de redacción del diario La Nación, Jorge Fernández Díaz, quien llegó a la teoría de que "A la oposición la asesora Capusotto"

No hay comentarios: