Sabemos que todos los candidatos del PJ, con distintos matices y distintos "olores", representan más o menos la misma lógica, por no decir mierda, que queda mal. Esa "lógica" tiene que ver principalmente con adaptarse a las diversas coyunturas que se van presentando en el mundo, en el país y en la región. Por eso un día los pejotistas son neoliberales, a los cinco minutos libertarios del "campo nacional y popular", y en menos que cante un gallo, reyes de la recuperación de la "competitividad" y la "racionalidad" económica. Lo que no se puede negar, es que quizás por cuestiones discursivas, de maneras de ejercer la porción de poder que los verdaderos dueños de la Argentina les dejan administrar, o tal vez porque quizás en algún punto el PJ, pretenda ser en sus sueños un verdadero poder hegemónico e independiente, que suelen caer mejor o peor al establishment autóctono e multinacional. El kirchnerismo se ha caracterizado por potenciar a mansalva el "relato" de la defensa de los trabajadores, de los intereses nacionales y de la soberanía, mientra que sin por derecha siguió siendo una yunta de multimillonarios que jugaron a hacer negocios con "empresarios" cuasimafiosos de los propios y extraños, es decir de los clásicos ladris que negociaron con cuanto gobierno pasó por la Casa Rosada, sea dictatorial o democrática. En esa mecánica siniestra, y sin entrar en teorías conspirativas berretas, el verdadero poder corporativo (banqueros, timberos de las finanzas, empresarios, multinacionales y sus laderos traidores de la burocracia sindical y la corporación política cavernícola, nos dan un mínimo margen de "elección, por llamarlo de alguna manera. Tiene que ver con esa absurda historieta de poder votar a supuestos más buenos o menos buenos. Claro, resulta que ahora al lado del inescrupuloso y ambicioso Sergio Massa, el ex motonauta Daniel Scioli, otro codicioso y camaleónico exponenete del pejotismo más recalcitrante pero camuflado de moderado, parece con el apoyo del aparato oficialista una suerte de Camilo Cienfuegos bonaerense. Esa es la trampa cultural, mediática y comunicacional en la que nos tiene de rehenes hace décadas estos muchachos tan volátiles. Miren de todos modos el dato curioso de como los Gusanos cubanos en Miami celebraron el triunfo del limitado Massita en las PASO el pasado 11 de agosto. Esto fue publicado en un semanario "argentino" que se edita en Miami y que es encabezado por un tal Oscar Posedente, un clásico facho consuetudinario de estas pampas. El hombre celebró las "ironías" y "definiciones" del intendente del Puerto Madero de la Provincia de Bs. As., el municipio del Tigre. El libelo tiene una tirada de 43 mil ejemplares y tiene como columnista estrella al reaccionario José "Pepe" Eliaschev. Así los cuenta el sitio del ultramacrista, Ignacio Fidanza, responsable de la "PROlítica Online:
La victoria de Sergio Massa sobre el Gobierno nacional fue celebrada en Miami por el Semanario Argentino, una publicación dirigida a los residentes argentinos en esa ciudad.
“Sergio le dio Massa al kirchnerismo”, fue el título de tapa del periódico dirigido por el periodista, locutor y productor Oscar Posedente, que logra una tirada de 43 mil ejemplares semanales.
La comunidad argentina del Estado de Florida es la más grande de Estados Unidos con más de 100.000 personas y la mayoría se concentra en Miami.
Se trata además de un nutrido electorado que supo captar Barack Obama en las recientes elecciones, tarea para la cual acudió al consultor peruano Sergio Bendicen, ahora asesor de Massa.
Uno de los columnistas habituales de Semanario Argentino es José “Pepe” Eliaschev, crítico del kirchnerismo.
El diario no ahorró elogios sobre Massa con eje en las declaraciones que dio tras el triunfo. “Optó por ser irónico para referirse a la derrota que le propinó el kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires”.
“Haciendo uso de su cintura política tomó prestadas dos frases que forman parte de las máximas del Gobierno para repetir en los reportajes que dio hoy, después de su triunfo de anoche. ‘El gran error que cometimos fue armar un frente político y ganar una elección’, lanzó con sacasmo. Y también utilizó: ‘En la vida hay que elegir’, lema de campaña K”, publicó Semanario Argentino
Y citó la frase de Massa sobre que no considera tener “un cheque en blanco” con el triunfo del domingo, una apuesta a aumentar el caudal electoral para octubre.
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