lunes, 11 de noviembre de 2013

Claudio Villarruel y Magnetto, en menor o mayor escala, dos violadores de La Ley de Medios de la Democracia

La televisada "Guerra del Golfo", entre Clarín y el Gobierno, donde los mortales comunes vemos llamaradas ininteligibles e incomprensibles en la oscuridad del divorcio negociado con tires y aflojes entre las dos mafias que se disputan el poder en la Argentina, continúa con sus "esbirros" operando para proteger sus quintas, diría el volátil Víctor Hugo Morales con esa voz impostada de falsa ética alivertiana. El sábado dio asco escuchar en el TVR de Gvirtz al "Camilo Cienfuegos" del Grupo Electroingeniería, Claudio Villarruel, defendiendo con ese tonito coloquial de "me hago el boludito y el buenito pero te garco como el mejor", las bondades de la Ley de Servicios de Comunicacion Audiovisual, que él mismo viola siguiendo los lineamientos de su patrón Gerardo Ferreyra, el ex ERP al que Santucho desde el más allá debe estar buscando para cagarlo a trompadas. Nada diferente a lo que hacen los otros hipócritas del Oligopolio, nos referimos a los Kirschbaum de Mangetto, quien a través de sus monigotes de "seisieteochistas", pero al revés, también miente descaradamente para defender los intereses que representa el holding que regentea junto a Aranda, los Noble y Pagliaro, que no es precisamente Gian Franco...  Así están la cosas muchachos!. Los tipos se disputan millonadas de dólares con estas truchadas impresentables y nosotros, ciudadanos comunes que intentamos trabajar de "periodistas", les seguimos haciendo el caldo gordo, ¿cómo?... haciéndonos los pelotudos, mirando para otro lado mientras nos hacen el verso de las nuevas tecnologías y la promesa de eso que tanto anhelan las vedettes del medio,: la fama, la gloria, el reconocimientos de las viejas en el supermercado, en la calle, en la familia, con los amantes, mientras nuestros recibos de sueldo de esclavos y soldados de estos facinerosos nos recuerdan cada mes que no somos parte de ese poder ,sino sólo forros de sus matufias, nada más!. Mediten amigos, los que sigan avalando esto se van a arrepentir cuando les empiecen a decir "gracias por los serviles servicios prestados y por entregarnos el alma, pero saben qué, tenemos que reestructurar debido a los planes de adecuación" que, no tengan dudas!, serán acordados entre ellos, los que detentan el power de verdad, de un lado u otro de ese mostrador imaginario, tan fino, frágil, volátil y delicado como la ideología de Patricia Bulrrich, Lanata, Gelblung, Barone, Doman, Scioli o Massa, entre otros burócratas del Ministerio de la Contradicción Permanente.

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