miércoles, 5 de agosto de 2015

El Show Clarín/Lanata/Domínguez versus Aníbal continúa mientras nos imponen a Scioli o Macri

La máxima o principal axioma de los investigadores de las comunicación es que si se quiere imponer una idea y distraer a las audiencias masivas, ergo: a la sociedad, no hay mejor opción que generar una información, hoy considerada mercancía del sistema de consumo, imponerla con la repetitividad, y reforzarla generando que el oyente, escucha, televidente o lector potencie su posición sobre algún tema en particular. Con el show business que arrancó el domingo en PPT el domingo y el supuesto atentado a Lanata queda claro que el antiK se vuelve más antiK de cara al domingo porque le suma creer lo que ya creía, por ejemplo que a Nisman lo mató "La Yegua", el que está del otro lado refuerza la creencia de que el nefasto Clarín es el enemigo público número uno del Gobierno porque va contra el "Chapo" Aníbal, alias "La Morsa", y los que no entran en este cisma, los menos, tendrán más argumentos para creer que todo el peronismo es una mafia que llegado el caso hace lo que Maquiavelo mande. Lamentamos que medios alternativos al poder se enganchen en esta puesta en escena, que no tiene otra finalidad que entretener a los votantes sin mostrarles el tema de fondo. Más allá de las denuncias mediáticas contra Fernández, los piedrazos y tiros al edificio de Lanata y todos los opinadores seriales que hablan las 24 horas del día sobre estas banalidades, la realidad que no ocultan es que esta cosmética, este cotillón encubre la triste imposición de dos supuestas versiones de un mismo modelo de desigualdad que cada vez amplía más la brecha entre ricos y pobres. La alta burguesía pituca se pelea por el poder, y a nosotros como siempre, nos muestras una realidad virtual que en vez de política real no es más que un programa de intrigas y chismes. El esquema de dominación sobre las clases medias bajas, bajas, rebajas, y directamente excluidas define el domingo quien va a ser el nuevo gerente del país pero sin romper nunca sus relaciones y acuerdos de clase por sobre todo lo demás. Se los repetimos, el peor enemigo que tienen, somos nosotros, los obreros de la tinta y el papel y todos los demás, quienes queremos con toda justicia ganar más de un salario mínimo y miserable de 5588 pesos que recién llegarán a 6060 en enero de 2016. Walsh, Urondo, Gelman, Gleyzer, Haroldo Conti, y otros grandes del periodismo se reirían de esta manipulación burda que no hace más que hablar mal de nosotros como comunicadores e integrantes de este pueblo engañado y autoengañado de la mañana a la noche. Ayer sólo faltó que nos dijeran que Aníbal Fernández, quien si debería estar en cana por la Masacre de Avellaneda, era Pablo Escobar Gaviria, y que Lanata una suerte de Payador Perseguido o el próximo Nisman... ja jaaja! ¿Cómo podemos engancharnos en esta novela que no se le hubiera ocurrido ni al mismisimo Alberto Migré... otra vez colegas, compañeros y amigos, volvamos a ser periodismo por favor!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

!Es cierto!!!! Desde el lunes en el laburo mis compañeros, auténticos "gorilas de a pie" (je jeje...), repetían como loros: "el gordo termina como Nisman!!!" Increíble!!! Igualmente muchachos, lo de la trompetita manchada de sangre ya no tiene goyete!! Salute...

Pantuflas dijo...

Ya el lunes mis compañeros de laburo, verdaderos "gorilasdeapie" (Jejeje...), repetían como loros: "Al gordo lo hacen cagar como a Nisman, ya van a ver..." ¡Se podrá ser tan pelotudo! ¡Todo el santo día los siete días a las semana viendo esos canales de mierda! Laaaa... Salute