miércoles, 6 de enero de 2016

Los aumentos imparables, ajustes y amenazas del pizzero Prat Gay obligaron a Moyano a salir a marcar la cancha!

El kirchnerismo cometió cientos de errores y se fue derechizando desde la muerte de Néstor, más allá de la corrupción estructural que permite este sistema de desigualdad permanente a cualquier administración, así y todo vuelve a darse lo que repetimos tantas veces acá. Al lado de lo que está haciendo este gobierno empresario encabezado directamente por uno de sus CEO, ya sin intermediarios de la corporación política, salvo claro, monigotes como el narcodiputado (que nunca fue al Congreso) Sergio ¿Tomás? Massa y radichetas ambiciosos, la etapa K parece ahora un período de reformismo progre, obvio que a las piñas con la devaluación, con chantas soberbios que hicieron sus buenos vueltos traicionando a diestra y siniestra, pero claro, sin dejar que la miseria volviera a recaer totalmente sobre los laburantes en favor total del empresariado y latifundistas sojeros, esos a los que se llaman productores. Eso precisamente los mantuvo 12 años en el poder. Nadie puede decir todavía si ir a una elección nacional con un clon de Macri como Scioli fue una estrategia errada o una milimétrica y organizada retirada estratégica, algo así como: "muchachos nos vamos, perdemos por poquito y los dejamos que se incineren solos". Porque hay algo que por más críticas que se puedan hacer, algunos sectores del peronismo tienen muy claro. La ambición de la ultraderecha es tal que ni siquiera cuidando la formas con su supuesta buena onda pacificadora con los globitos de colores after office puede ir contra su naturaleza ultraexplotadora y antiobrera. Por eso están cebados y cegados... no pueden parar!. Asumieron el 10 de diciembre y en días nomas impulsaron un 40 por ciento de devaluación para beneficiar a los exportadores agrícolas dueños de la Argentina, liberación del dólar con los inevitables aumentos de precios que no paran ni con la orden de un juez federal y que ya destruyeron el salario que tenían los trabajadores hace un mes, bajo y todo como estaba. Ahora a través del Grupo Clarín (y sus satélites naturales envalentonados, nos referimos a La Nación y Perfil), el 6,7,8 de Macri tienen justificados todos sus "sinceramientos de la economía". Pregunta: ¿nunca se va a sincerar a favor del pobre tipo/a que labura todos los días de sol a sol, del que no tiene siquiera un empleo o está definitivamente fuera del sistema?. Hoy es la nafta, en las próximas semanas luz y gas. Ni hablar de ese error garrafal que están cometiendo haciendo uso del odio de las clases medias lumpen urbanas contra el gobierno saliente para aprovechar hacer despidos en todos lados. Pragmatismo cero muchachos. Si dijéramos cuanto gana cada uno de ustedes, tal vez el lumpenaje xenófobo porteños, cordobés y santafecino, entre otros, por ahí entendería por comparación con sus bolsillos hacia donde van estos Chicagos Boys anacrónicos. Uno de los que esperó cinco minutos y confirmó lo que sospechaba sobre para donde iban a agarrar los PRO fue Hugo Moyano... si lo que quieran, un burócrata, un empresario, un patotero, como lo quieran calificar. Pero referente de los laburantes que más ganan en el país, los camioneros, que no son pocos. Al lado del quema urnas Luis Barrionuevo y el agente del Batallón 601, Gerardo Martínez y sus gordos amigos como Cavalieri, el líder de la CGT Azopardo parece Heidi. Se da la misma lógica con lo que hemos visto hasta ahora, el kirchenrismo muy equivocado suena a carmelismo descalzo en comparación con la mezquindad de Cambiemos... que rima con rajemos!. Moyano levantó el guante y hace lo que tiene que hacer como hizo con el menemismo y con el kirchnerato cunado CFK empezó a pifiar la parada, encabezar el reclamo general de los que menos tienen. Las circunstancias llevan a que si Hugo no se da vuelta y mantiene su postura dura con Alfonso de Hoz, o como ya le dicen en los pasillos del palacio de hacienda, Alfonso "Domingo" Prat Gay, habrá que encolumnarse detrás de él. Los patrones que gobiernan no se la van a llevar de arriba. Si ahora nuestro hijo de puta tiene que ser el camionero, pues lo será hasta que la cosa varíe. Porque como dijimos desde el primer día, más allá de que este país tienda siempre a ir para la derecha, cuando le estalla el 2001 en la panza y en sus depósitos bancarios no tiene ningún drama en panquequizarse en dos minutos. De hablar loas de Macri y EE.UU. pasan a aliarse con los que llaman despectivamente piqueteros, a valorar la simbología revolucionaria del Che Guevara, empiezan a putear a Obama y al sistema financiero mundial y a ver a Moyano rubio y de ojos azules... como todo siga así, quedan meses para la mutación de la autodenominada clase media...

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