lunes, 8 de febrero de 2016

Los vaciadores de medios no descansan fines de semanas ni feriados, hagamos lo mismo!

Esto es lo más terrible que nos puede pasar, no lo permitamos jamás!
Si hay algo que reconocerle a los garcas, es que viven todas sus horas para defender sus intereses de clase privilegiada y opresora. Aunque uno los ve descansando en paradisiacas playas caribeñas o centros internacionales de esquí, los miserables usureros están todo el tiempo conectados a sus celulares para dar indicaciones a sus empleados bien remunerados para que avancen contra quienes pongan en vilo cualquiera de sus multimillonarios bienes, y obviamente sus capacidad de fuego en base al poder que acumulan minuto a minuto. Una de las autocríticas que tenemos que hacer los labrantes de prensa es que en el pasado cercano entramos en un aburguesamiento que nos jugó en contra, más allá de que nos movimos cuando las cosas se pusieron brava. Claro, el salario bajo pero que nos permitió hasta hace meses nomas, saciar las ansias consumistas que nos impone el sistema capitalista, que con su "magia" esclavizadora funciona como el mejor de los narcóticos. Las vacaciones, los fines de semana largos, cambiar el autito, alimentar a la mascota mejor que a cualquiera de los pibes que andan tirados en la calles desde hace décadas o fusilados en las barriadas pobres por canas lumpen que salen de esas mismas barriadas, por culpa de este mismo y perverso sistema, al que deberíamos criticar siempre, no sólo ahora, porque para funcionar, este estigma creado por la mezquindad del hombr tiene que ser injusto y desigual. Ahora nos toca a nosotros y es una buena experiencia para saber lo que es cagarse de hambre y que un sorete con buenos contadores, abogados y alcahuetes nos arruine la vida a la mayoría. A no olvidarlo... si queremos ganar esta pelea histórica, el tiempo les dará una perspectiva de lo que está ocurriendo, no tenemos que detener la lucha ni un sólo segundo. El aparato del poder es impiadoso, que como dice el tango de Gardel y Lepera, en la noche hace que su ambición sólo descanse y su músculo duerma un ratito, nada más, avasalla, corroe y destruye absolutamente todo con tal de imponerse, inclusive el planeta donde, lo olvidan, también están sus propios hijos. Un descuido nuestro equivale a 100 pisadas de cabeza de estos energúmenos sobre nuestros futuros, la de nuestros pequeños, nietos familias, amigos y compatriotas. Miren lo que pasó este sábado y domingo y no paremos la maquinaria de resistencia un segundo!:   

Primero le tocó a las ediciones zonales del diario El Argentino, el fin de semana pasado. Ahora, la patronal del Grupo 23 borró del mapa a las revistas 7 Días y Cielos Argentinos. Ambas publicaciones, que habían dejado de imprimirse en el marco del vaciamiento de la compañía encabezada por Sergio Szpolski y Matías Garfunkel (la primera hace 18 meses y la otra en noviembre de 2015), formaban parte del portal Infonews, de la misma empresa, y este fin de semana fueron dadas de baja. Los trabajadores, a su vez, no cobramos los sueldos desde noviembre, incluido el medio aguinaldo, y la empresa no nos recibe. Con la nueva medida editorial, la compañía pretende que desaparezcan esos canales de comunicación junto con las personas que los llenamos de contenido durante años. Sin despidos, sin pago de sueldos, sin ley. Los empleados continuamos la resistencia, junto al resto de las redacciones del Grupo 23 y al Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), para mantener las fuentes laborales, en una lucha desigual frente a una patronal que se llenó los bolsillos durante años y ahora despliega su desprecio hacia los trabajadores. Después de más de tres meses sin salarios y en medio de un lockout patronal, la falta de respuesta solo trasluce agresión y desprecio hacia los trabajadores. La mayor parte de nosotros se desempeñó en distintos medios y razones sociales del Grupo 23, trasladados de acuerdo con las necesidades coyunturales de la compañía. Hoy, esos movimientos parecen haber sido usados para favorecer un vaciamiento. No obstante, los compañeros de ambas revistas seguimos dispuestos a defender nuestros salarios y nuestro trabajo. Y estamos con fuerzas suficientes para evitar que crezca el silencio, para no tener cada día menos voces y, en definitiva, para que no cierren más medios de comunicación. Radiografía de un vaciamiento Cielos Argentinos se distribuyó de manera gratuita en los vuelos de Aerolíneas Argentinas hasta fin de 2014. El año pasado empezó a repartirse, también sin cargo, en las salas de embarque de Aeroparque Jorge Newbery. En noviembre, Sergio Szpolski y Matías Garfunkel cesaron su impresión. Eso sucedió a pesar de contar con un staff reducido y de que más del 60% de las páginas estaban cubiertas con avisos (tanto en las últimas ediciones publicadas como en la de noviembre, que nunca se imprimió, se rechazaron pautas por falta de espacio). El año que viene 7 Días cumplirá medio siglo de vida, si es que sobrevive. Entre otros hitos, cubrió el Mayo Francés, la Primavera de Praga, el Cordobazo, la guerra de Vietnam y publicó el Informe Rattenbach, que revelaba por primera vez el trasfondo de la guerra de Malvinas. En 2010, se convirtió en la revista dominical de Tiempo Argentino, dando espacio a voces diversas. Hace 18 meses, el Grupo 23 cesó su impresión y la incluyó en Infonews, hasta que fue eliminada del portal el último fin de semana. El conflicto en ambas revistas comenzó hace dos años, cuando pertenecían a razones sociales distintas dentro del Grupo 23: Milke SA (Cielos Argentinos) y Manfla SA (7 Días e Infonews). En 2015, luego de 12 meses de retrasos en los pagos, amenazas de despidos y mucha resistencia de los trabajadores, la empresa cerró las publicaciones Forbes, Lonely Planet, Newsweek, Auto Bild, Golf Digest y Cielos Argentinos, que conformaban la ex División de Revistas Premium, y más de 20 trabajadores se alejaron con retiros voluntarios. En abril de 2015, la patronal reabrió Cielos Argentinos y Forbes (que editó dos números más antes de ser discontinuada). En junio traspasó, de manera compulsiva, a todo el personal de 7 Días a Milke SA. En paralelo, Cielos Argentinos empezó a editarse bajo la razón social Sixis SA. La empresa nunca explicó el motivo de esas decisiones, a pesar de que la CGI pidió explicaciones en dos ocasiones. En diciembre, las autoridades trasladaron al director de ambas revistas, Federico Águila, al canal CN23, también del Grupo 23. Por la falta de pago de los salarios de los últimos tres meses, por la falta del pago de aguinaldos, por la interrupción de las publicaciones, por el traslado de los empleados jerárquicos, por los cambios de razones sociales sin explicaciones, por la falta de comunicación por parte de la empresa, por la falta de pago de aportes jubilatorios, por la falta de pago de obras sociales, por el cierre de medios, por la desaparición de las publicaciones en Internet, y porque los trabajadores no cobramos, ni estamos despedidos, decimos: No al vaciamiento del Grupo 23.

Comisión Interna 7 Días y Cielos Argentinos

Daniel Jatimliansky: 15 3232-1213 / Juan Vera: 15 5349-7850

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