jueves, 12 de mayo de 2016

Mala para los Trabajadores pero buena para la Argentina: Massa vuelve a demostrar que es un garcócrata

A muchos les sonaba raro escuchar que un personaje siniestro como Sergio Tomás Massa ladrara por los medios (su máxima y principal obsesión) en favor de una ley antidespidos que incluía el pago de doble indemnización. Bueno a la hora de la verdad el feudalito de Tigre mostró las garras otra vez y volvió a demostrar que basta que le den dos minutos de protagonismo para dilapidar sus propias aspiraciones de estadista con posibilidades de llegar a la Casa Rosada. En medio de esta coyuntura política, un político con un cachito de lucidez jamás hubiera desaprovechado la oportunidad de quedar como un héroe. El problema es que al marido de Malena Galmarini lo asesora el enemigo: él mismo abrazado a su ego desenfrenado. Cualquiera en su situación se hubiera despegado del kirchnerismo y con cintura arbitrar para el lado de sus futuros votantes, los miles de trabajadores que el desgobierno del CEO Macri ha, y sigue dejando en la calle. Sin embargo el hedonismo de este muchacho que no aprende nada de sus errores vuelve a olvidar que quienes están a su lado tienen sus propios intereses y no van a dilapidarlos por seguir a un necio lleno de mezquindad. ¿Cómo puede pensar Massa que quienes chupan de la teta de la burocracia sindical hace décadas pueden tirarse a la pileta sin agua de votar en contra de quienes dicen representar?. Ese kiosco es seguro, una diputación u otro cargo es siempre transitorio en el marco del sistema de elección que con todas sus imperfecciones impone la democracia. En el anterior posteo ya adelantamos un poco lo que le iba a pasar, y ojo!, no por ser futurológos ni adivinos, sino porque es una obviedad, a "Sergio" le hacen creer un ratito que es el Zar Nicolás Romanov y al rato lo abandonan y lo quieren matar. Para quienes están perdiendo sus fuentes de ingresos este tipo macabro es una desgracia, pero veamos la parte llena del vaso. Nadie olvidará esta actitud en favor de los intereses de los empresarios, a los que ama y envidia siempre y que el Medio Pelo Argento, ese que adora la "Meritocracia" (o mejor dicho Garcocracia) de la mentira, puso en Balcarce 50. Por suerte Massita, otra vez y como buen gacócrata se va a quedar más sólo que Hitler el Día del Amigo.

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