lunes, 31 de octubre de 2016

El plan para naturalizar la desigualdad es responsabilidad de quienes administran los poderes del Estado y los medios de incomunicación

Cuando se habla de "matriz de corrupción" se entiende que el concepto es muy abarcativo. Una cosa es que esos focos de choreo estén cercanos a los ámbitos de los tres poderes del Estado, y en consecuencia "derramen" esas miserias a grandes sectores de la sociedad, y otra cosa muy distinta es esto. Porque vamos!, no nos autoengañemos y menos nos dejemos engañar; que unos tipos que tienen que estar al servicio de las personas que los votaron y a quienes representan, se suban los sueldos entre gallos y medias noches, a espaldas del pueblo, y de manera corporativa pone al mismísimo estado de derecho en peligro. No se puede naturalizar ni legitimar bajo ningún punto de vista o excusa que diputados y senadores de la Nación se otorguen un 47 por ciento de aumento, quienes además ya arrastraban salarios delirantes. Un trabajador promedio, y en blanco (cosa que cada vez escasea más) no supera los 10 mil pesos, cuando en realidad con una familia tipo se necesitan 19 mil pesos para sobrevivir, y no los dice el Gramna ni Prensa Obrera, lo informó el diario Clarín según datos oficiales de la Dirección de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, no de la Sierra Maestra, ok?. Para estas matufias, igual a las de los "empresarios de medios" no existieron, existen, ni existirán grietas. La sanata de La Grieta es una estupidez que le venden a la gente para mantenerla dividida entre K, antiKa, PRO, antiPRO, etc, etc. Para usan (y nosotros nos dejamos usar) a los que ejercemos este oficio cada vez más inclinado al gacetillismo oficial de turno. Esta estrategia muy bien urdida en base a cada vez más cierres de medios y una marea interminable de despidos conduce cada vez más a la autocensura. El periodista deja de cumplir su función y antepone a todo su supervivencia, piensa "si me salgo del libreto de mi patronal me dejan en la calle", así que por las dudas me callo la boca y pregunto lo que dicen la tapa de los diarios y reproducen radio y canales de TV", que es lo que los interpelados tienen preparado para contestar en base a sus media training absolutamente aceitados. Así se naturalizan desde hace décadas, la desigualdad, esa riqueza de unos poquitos y la miseria de la mayoría, tarifazos, impuestos al consumo y al salario, etc. El mensaje es "llegás con mérito", pero ¿donde hace méritos un pibe condenado a nacer en una villa miseria con padres sin laburo, que sobreviven gracias a las dádivas que les aseguran quienes les canjean su voto por algo de comida para seguir alcanzar o seguir en el poder?. Encima en el contexto de la delincuencia, las drogas de baja estofa para que no vivan mucho (porque sobran), ya que cada vez se necesitan menos humanos para cualquier tipo de esquema de producción. Marx quedó demodé en el sentido de que, ¿cómo se hace una revolución proletaria si ya no hay proletarios (trabajadores) y los pocos que quedan son disciplinados con el miedo a quedar fuera del sistema de opresión e injusticia social permanente?. Los únicos que pueden estallar acorralados por el hambre son los que conforman el Ejército de Reserva (desocupados), ese que ya no tiene posibilidad de ingreso alguno, que sale a afanar un par de zapatillas o un celular para dar de comer a su familia, y si lamentablemene está pasado por las circunstancias, caga a tiros a cualquiera. Justificativo perfecto para incrementar las fuerzas represivas que en caso de levantamientos sociales ya saben lo que tienen que hacer: cuidar en base a balazos y palos los intereses del Estado empresarial que los forrea a ellos también para que les cuide sus inmensas e interminables fortunas. Podemos seguir repitiendo como loros de la burguesía urbana eso de "y bueno viejo, ¿que vas a hacer?... esa es la realidad y no se puede cambiar". Por eso no es casualidad el eslogan de Cambiemos "Si, se puede"; si se puede seguir así por siempre, con esta engañosa paz social que resulta del silencio y la mansedumbre de los explotados y excluidos. Esa consigna no se diferencia para nada de la de los kirchneristas, nuevos ricos burgueses con discurso izquierdoso, que rezaba "Nunca Menos", lo que significa otro metamensaje conservador: "Tampoco más"... La idea de este poder con sus divisiones pero unido en proteger lo que consideran suyo gracias a Darwin es: "reciban estas prebendas, no jodan!, y dejennos gobernar, ergo: hacer nuestros negocios tranquilos". Después lo de siempre, se disputarán, como ahora, la hegemonía entre ellos y nosotros la veremos por TV creyendo que algo de lo que dicen Lanata, Navarro, Nelson Castro, Sylvestre, Pagni, Roberto Caballero, Morales Solá, Sandra Russo, Julio Blank y Van der Kooy o Víctor Hugo y Aliverti es un River-Boca. O por qué creen que estos muchachos ególatras nunca cuentan que todos los que ejercen cargos públicos, las figuras del "periodismo" mediático y sus adláteres cobran fortunas por mes y que miran desde la cima del Everest, el sueldo de un laburante. La idea nos es que ellos también ganen salarios de hambre, sino que todos tengamos acceso a un ingreso digno, pero claro, la ambición, la vanidad, las ansias de mandar, de tener "prestigio", les nubla las ideas y hasta a más de uno les hace olvidar sus pasados volviéndose absolutamente insensibles... así nos va!!!. No permitamos, ni como periodistas ni como ciudadanos que se dedican a otra tareas, a que esto sea bandera de un inventado e impuesto "Sentido Común". No muchachos!, es mentira que un pibe nace chorro, que hay que matarlos para que no jodan, que los negros son malos y malandras, que ser frívolo es ser libre y sirve para estar inmune al "bajón" de la realidad cotidiana, que hacerse el boludo es una buena táctica, que pasar caminando al lado de un pibito y toda su familia tirada y hambreada en la calle es lógico, mientras un minúsculo grupo de tipos multimillonarios que tomaron el gobierno, o lo administraron desde afuera, en varias ocasiones de la historia argentina, anden en jets privados, yates suntuosos, hoteles de lujo, posean tierras y propiedades sin límite, mientras un campesino no tenga un pedacito de tierra para plantar una papa. Eso y mucho más no es natural, ni es así, ni es normal, y es absolutamente falso que no tiene otra salida!. Esa es la máxima de los que cuidan sus quintas: desmoralizan y potencian la apatía, la insolidaridad, el conformismo, la indiferencia, la inacción, la falta de proyección en pos del bien común. Lo que quieren es que terminemos encerrados en nuestras cuevas enrejados y con cámaras de seguridad sin hinchales las pelotas viendo Netflix las 24 horas y llamando al delivery como única salida para buscar la pizza Prat Gay "salvadora", a la puerta. Eso para los que pueden claro!, para el resto, mirar por TV todo lo que nunca van a poder tener para que sigan en el resentimiento y sean caldo de cultivo de la necesaria delincuencia que garantiza ajustar, reajustar, y endeudar en base a un sistema de control sobre los pobres que no podrán siquiera soñar con tener una vida decente alguna vez. 

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